En otra jornada maratoniana más, representantes de la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana, se han reunido en la mañana de hoy con dos de los máximos exponentes de la Dirección General de Agricultura, Ganadería y Pesca: el Subdirector General, Vicent Marzà, y el Jefe de Servicio de Producción y Sanidad Animal, Manuel Lázaro, a fin de conocer de primera mano, el estado actual del borrador del Anteproyecto de Ley de Protección de los Animales de Compañía de la Generalitat, al cual la FCCV presentó alegaciones el pasado mes de mayo.
Este borrador, plantea modificaciones que afectarían directamente al día a día de la práctica totalidad del colectivo de cazadores, como ya informamos tiempo atrás. A modo de ejemplo, prohíbe la utilización del collar eléctrico, veta el sacrificio público de los animales (pudiendo afectar a las tiradas de pichón y codorniz, tal y como ha ocurrido en otras Comunidades como Baleares, donde ya se han prohibido estas modalidades), limita la celebración de cualquier feria o campeonato en la que participen animales y aumenta las exigencias de bienestar de los animales hasta extremos inasumibles por el colectivo cinegético, sugiriendo, entre otros, la prohibición de que los perros puedan estar encerrados en corrales o edificaciones en los que no resida habitualmente el propietario. Ante este escenario, sectores como los rehaleros verían prácticamente imposible seguir practicando su actividad.
La Administración Valenciana ha trasladado a la comisión federativa que el documento en estos momentos se encuentra en manos de la abogacía para estudiarlo en profundidad, una vez valoradas las alegaciones de todas las partes interesadas, entre ellas las de la Federación Valenciana de Caza, como máximo representante del colectivo de cazadores. Tras este paso por los abogados de la Generalitat, volverá a abrirse un nuevo periodo de alegaciones.
La FCCV ha hecho saber al Subdirector de Agricultura que no permitirá ataque alguno a los derechos de sus federados, exigiendo además su inclusión en el Consejo Asesor y Consultivo en materia de protección de animales de compañía, a fin de que la voz del mundo cinegético sea tomada en cuenta durante la redacción del texto definitivo y en cualquier otro asunto que implique a los cerca de 40.000 cazadores de la Comunitat y sus animales.