Brotes verdes y grandes expectativas de futuro para el mundo de la caza en la localidad de Lliria. Tras haber superado recientemente el envite político-ideológico de algunos grupos de la corporación municipal que pretendía el cierre del Campo de Tiro “La Arboleda”, el club de cazadores “La Concordia” que preside Francisco Gil dió un nuevo paso de gigante hacia la aceptación y normalización de la actividad cinegética como patrimonio cultural, tradicional y deportivo con su brillante participación en la “I Fira de l’Esport” de la localidad.
El pasado sábado 16 de septiembre, en un fin de semana plagado de juegos, clases prácticas, demostraciones y exhibiciones de infinidad de modalidades y disciplinas deportivas, tan dispares como el ajedrez o el agility, la gimnasia rítmica o el karate, la entidad edetana apostó, como mejor escaparate posible del sector cinegético, por las dos actividades que viene ofreciendo, como buque insignia, l’Escola de Caça i Natura: la cetrería y el tiro con arco.
El resultado fue un éxito rotundo del club “La Concordia”, cuya intervención sobresalió en el programa de actos rivalizando en protagonismo con deportes claramente mayoritarios. Y es que, desde el primer minuto, los monitores de l’Escola de Caça, con la inestimable cooperación de la directiva y colaboradores del club, se metieron al público en el bolsillo con la belleza y espectacularidad de las aves rapaces e hicieron disfrutar a todos los asistentes con el formato participativo del taller de tiro con arco diseñado por la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana.
La participación en estas primeras jornadas le mereció a la asociación de cazadores el reconocimiento del Ayuntamiento de Lliria, que a través de su Regidoría de Deportes, agradeció la colaboración del los mismos en la Feria y exalzó su labor en la promoción y difusión del espíritu deportivo de la caza.